Nunca te detuviste a ver el cielo
Nunca te sentaste a divagar en el alba
En la muerte del día y el nacimiento de la noche
Y dejaste que la majestuosidad del cielo se llevara tus pensamientos
Nunca te diste cuenta de la sinfonía de colores que te perdías
Abre tus ojos, no puedes culpar a alguien más ni puedes decir que no lo notaste
Estaba plasmado en el cielo para que lo vieras
Por qué yo lo puedo ver y tu no?
Este es solo el comienzo...
Mariano Arnaiz
Foto de Génesis Bastidas
9 de mayo de 2010
Caracas de noche
Publicado por Frankie en 7:39 p. m.